Venezuela: Desbarajuste monetario y represión de la izquierda. Dossier

AAVV

20/12/2016

Caracas, 18 de diciembre, 2016.- Mediante un documento titulado "De cara Al Pueblo", se pronuncian y presentan exigencias al gobierno y al presidente Nicolás Maduro, ex ministros y ex ministras del presidente Hugo Chávez, el Mayor General Cliver Alcalá Cordones, y voceros de Marea Socialista. Se refieren a la situación provocada por lo que consideran como "medida muy improvisada de suprimir la circulación de billetes de 100 Bs sin garantizar primero la disponibilidad de moneda sustitutiva", lo que para ellos ha derivado en "un verdadero golpe a los bolsillos del pueblo", a pesar de que el gobierno haya dado marcha a atrás y haya prorrogado el uso de los billetes de Bs 100 hasta el 2 de enero.

Estiman que la conducta del gobierno y sus medidas fueron el desencadenante de los trágicos sucesos que han acontecido en distintas partes del país con saqueos, daños a comercios e incluso lamentables hechos de sangre, además de detenciones de personas a raíz de las protestas.  Critican duramente la manera como ha manejado la sustitución de los billetes el gobierno y las autoridades monetarias, llegando a plantear la "renuncia inmediata" del Presidente del BCV y de su Directorio en pleno, así como del Ministro de Finanzas y del Gabinete Económico en pleno.

Para que sea posible aliviar la situación creada, demandan la suspensión de la aplicación del Decreto que elimina los billetes de Bs. 100, hasta que se garantice la entrega en manos de la gente de los billetes sustitutivos, pues no tienen certidumbre de que el gobierno vaya a garantizar realmente la disponibilidad de las nuevas monedas al canje para el 2 de enero de 2017. Piden que se facilite la apertura amplia de cuentas en el sistema bancario bajo la supervisión de la SUDEBAN,  para personal jubilado y trabajadores del campo, con apoyo de la Defensoría del Pueblo y la FANB. Reclaman soluciones efectivas en lugar de represión a la protesta y se solidarizan con el revolucionario Freiman Páez detenido en Guasdualito por opiniones vertidas desde Radio Fe y Alegría.

Relacionan lo que está ocurriendo con el "inmenso hueco dejado por el bárbaro desfalco cometido contra la nación", y el pago de la "Deuda Externa Ilícita e inmoral", e insisten en una Auditoría Pública y Ciudadana, "para ir al rescate de los recursos que nos están arrebatando con el consecuente sacrificio del pueblo trabajador y de la mayor parte de la sociedad venezolana".

Urgen al presidente de la República, Nicolás Maduro, a dar "información veraz, explicaciones claras y garantías convincentes y tangibles". Claman por que la situación se resuelva dando prioridad para el pueblo y soluciones justas, sin represión, con más democracia y no con menos; restableciendo los derechos y libertades constitucionales.

Reproducimos seguidamente el texto del Documento completo:

DE CARA AL PUEBLO

La medida muy improvisada de suprimir la circulación de billetes de 100 Bs sin garantizar primero la disponibilidad de moneda sustitutiva, transformó en un verdadero golpe a los bolsillos del pueblo trabajador lo que en principio se había anunciado como una acción contra las mafias que especulan con la extracción y acaparamiento de papel moneda.

La gente trabajadora, bancarizada o no, y sobre todo los que habitan en zonas rurales o apartadas y se desenvuelve necesariamente con dinero en efectivo, sintió un zarpazo al ver invalidar, sin alternativas rápidas y efectivas, los escasos dineros con los que cuentan para sus compras y para el transporte, especialmente en estas fechas navideñas.

La oferta de canje de los billetes de cien bolívares en el BCV, que sólo tiene oficinas conocidas en la capital y en Maracaibo, se convirtió en un embudo muy difícil de pasar, como el camello por la aguja en la parábola de Jesús, pero al revés, por la que es más factible que pasen los ricos y los corruptos que el pueblo humilde. Es un suplicio innecesario para la población, que debe gastarse los reales que va a cambiar a Caracas con el viaje y la estadía fuera de sus hogares. Además, al no haber dinero disponible de otra denominación (ni nuevos ni viejos) el vale entregado por el Banco Central a cambio de los billetes consignados por el pueblo, hizo que las personas se quedaran "limpias", sin efectivo, después del calvario de las colas, privados de la posibilidad de aprovisionarse en los próximos días, porque ya no les reciben en las tiendas y servicios los billetes de Bs. 100 y no contar con otros que los reemplacen. Se ha tratado de un abusivo "corralito", no declarado, que muestra la indolencia del gobierno y de la burocracia para con el pueblo venezolano. En varias localidades del país se han producido tumultos y protestas del pueblo molesto a las puertas de los bancos e incluso saqueos de establecimientos por no haber efectivo válido para comprar alimentos u otros productos básicos, lo que se une a la inoperatividad o lentitud de puntos de venta electrónicos y de telecajeros. ¡Todo un colapso bancario y monetario!

Cuesta creer esta escandalosa torpeza y aparente descoordinación entre el gobierno y el BCV. Pensamos que tras la acción contra las mafias del dinero se ocultan otras disputas y situaciones de gravedad que afectan al sistema financiero y bancario. Hemos dicho hasta la saciedad que las raíces de toda esta situación provienen del sostenimiento de los mecanismos de captura de renta con los que se han entronizado camarillas burocráticas y grupos capitalistas (nacionales y extranjeros).

Pero lo peor es que frente a los airados reclamos y búsqueda de alimentos o formas de resarcirse por parte de sectores de la población, se criminalizó la protesta, como en los peores tiempos del "Pacto de Punto Fijo" y se arremetió de forma perversa e irresponsable contra dirigentes revolucionarios o se le atribuyó a desestabilizadores de la oposición, sin reconocer el legítimo derecho del pueblo a quejarse y exigir soluciones inmediatas por parte de las autoridades responsables y del Presidente de la República como encargado de la conducción de la nación, que tiene la obligación de garantizar el bienestar y la paz social, así como el cuidado del patrimonio de los venezolanos.

Creíamos que estaba aprendida la lección del 27 F pero surge de nuevo la desconfianza frente al comportamiento que se observa en el gobierno y en la fuerza pública. Se habla de heridos en algunos lugares y posible pérdida de vidas. Exigimos a los ministros de Defensa y al de Interior y Justicia que asuman una postura de respeto a los derechos constitucionales y los derechos democráticos del pueblo en estas circunstancias, como contribución a la paz y no al posible desencadenamiento de sucesos más trágicos todavía, al tiempo que rechazamos la detención del militante revolucionario Freiman Páez (detenido en Guasdualito).

Rechazamos rotundamente el uso de la violencia del Estado en vez de las soluciones justas y oportunas. La lucha contra cualquier mafia no se puede hacer a costa de los derechos humanos y democráticos, ni con lógicas que hagan peor el remedio que la enfermedad. No se puede hacer pagar las consecuencias a justos por pecadores.

Llamamos al pueblo a defender sus derechos con firmeza y a exigir, de manera pacífica, medidas que vayan en su beneficio y no de la perversa lógica económica y política que se viene aplicando, al margen de los principios constitucionales y de las esperanzas de nuestro pueblo en la revolución.

Ante todo esto, y vistos los elevadísimos niveles de improvisación e incompetencia de quienes han diseñado estas medidas, demostrados ahora por la decisión del Presidente Maduro de posponerlas parcialmente por unos días, nos sumamos a las voces populares que claman por:

  • La suspensión de la aplicación del Decreto que elimina los billetes de Bs. 100, hasta que se garantice la entrega en manos de la gente de los billetes sustitutivos.
  • Permitir la entrega de los billetes de cien bolívares en todas las unidades del sistema bancario nacional por el período en cuestión
  • Facilitar la apertura amplia de cuentas en el sistema bancario bajo la supervisión de la SUDEBAN (personal jubilado, trabajadores del campo, con apoyo de la Defensoría del Pueblo y la FANB)
  • Renuncia inmediata del Presidente del BCV y de su Directorio en pleno
  • Renuncia inmediata del Ministro de Finanzas y del Gabinete Económico en pleno

Lo que está ocurriendo tiene que ver con el inmenso hueco dejado por el bárbaro desfalco cometido contra la nación, que hemos denunciado reiterativamente, y con el sacrificio de la economía nacional frente a los que se lucran de una Deuda Externa Ilícita e inmoral, que hemos exigido someter a una Auditoría Pública y Ciudadana, como base para ir al rescate de los recursos que nos están arrebatando con el consecuente sacrificio del pueblo trabajador y de la mayor parte de la sociedad venezolana.

Deben someterse a revisión urgente, con verdadero diálogo y participación democrática y protagónica de la ciudadanía y sus organizaciones, la política, los planes y medidas económicas, financieras y monetarias del gobierno.

Urgimos, enfáticamente, al presidente de la República, Nicolás Maduro, a dar información veraz, explicaciones claras y garantías convincentes y tangibles a todo nuestro pueblo, poniendo en primer término sus necesidades y derechos frente a cualquier otra consideración.

¡Prioridad para el pueblo! ¡Soluciones justas! ¡No a la represión del pueblo molesto! ¡Más democracia y no menos! ¡Restablecimiento de los derechos y libertades constitucionales!

Firman:

Héctor Navarro (ex ministro del Presidente Hugo Chávez)

Ana Elisa Osorio (ex ministra del Presidente Hugo Chávez)

Gustavo Márquez (ex ministro del Presidente Hugo Chávez)

Oly Millán (ex ministra del Presidente Hugo Chávez)

Ramón Rosales (ex ministro del Presidente Hugo Chávez)

Mayor General, Cliver Alcalá Cordones

Y los integrantes del Equipo Operativo Nacional de Marea Socialista:

Juan García (cofundador de Aporrea.org)

Gonzalo Gómez (cofundador de Aporrea.org)

Nicmer Evans

 

La improvisación monetaria, la defensa de los privilegios burocráticos y el "doblepensar" oficialista

Omar Vázquez Heredia

En su obra de literatura "1984" el escrito británico George Orwell incorpora una categoría analítica denominada "doblepensar", con la cual hace referencia a la acción de los funcionarios estatales de pensar paralelamente la realidad de dos modos: un análisis racional que intentan su correcta compresión y otro que busca una forma de entender la realidad ajustada a los intereses del poder. En ese sentido, hoy después de varios días de improvisación monetaria comienzan unas largas jornadas de "doblepensar" para los intelectuales oficialistas y los comunicadores estatales, en realidad todos ellos y ellas piensan en su fuero interior que fue una muestra de incompetencia desmonetizar el billete de 100 bolívares mientras no tenían en las arcas del Banco Central de Venezuela para su distribución los billetes de 500 bolívares ni habían impreso más billetes de 50 bolívares, sin embargo al mismo tiempo ya se encuentran preparados para pensar el conjunto de absurdas excusas con que intentaran encubrir la incompetencia de Nicolás Maduro y Nelson Merentes.

Los intelectuales oficialistas y comunicadores estatales, cumpliendo con su rol mercantil de justificadores de oficio, escribirán en sus columnas y expresarán en sus programas de radio y televisión que la improvisación monetaria en realidad fue producto de un sabotaje internacional para evitar el despegue de los aviones con los billetes de 500 bolívares (se percataron cuatro días después de suprimir el billete de 100 bolívares), una estrategia brillante del Presidente Obrero Nicolás Maduro para golpear el dólar paralelo (una especie de Blitzkrieg monetaria expresaran algunos tratando de maquillar el desastre con algo de historia militar), un retroceso estratégico en el combate a las mafias de Cúcuta ante los daños colaterales sufridos por el pueblo trabajador, falta de información en el pueblo trabajador para cambiar los billetes de 100 bolívares producto de la campaña de desinformación orquestada por la ultraderecha en sus empresas de comunicación y redes sociales, sabotaje interno realizado por trabajadores de ultraderecha del BCV que obstaculizaron la distribución del billete de 500 bolívares (solicitando por supuesto el despido arbitrario de todo trabajador del BCV que no sea chavista), entre otras absurdas excusas tendremos que leer y escuchar desde hoy hasta que el gobierno nacional cometa otra nueva torpeza.

En realidad, todos sabemos que la desmonetización del billete de 100 bolívares antes de tener los suficientes billetes de 500 bolívares y de 50 bolívares en las arcas del Banco Central de Venezuela es otra muestra de la incompetencia de Nicolás Maduro y su gobierno, el cual intenta de todas las formas habidas y por haber evitar medidas estatales que intenten solucionar las causas del desastre económico que padece el pueblo trabajador venezolano, conservando el privilegio de un infama minoría: recibir dólares a 10 bolívares para importar con sobrefacturación. La eliminación del billete de 100 bolívares afectó de modo coyuntural al mercado paralelo de divisas, sobre todo a los intercambios de moneda que se efectuaban en Cúcuta. Pero, esa situación será pasajera, ya que las causas de la depreciación del bolívar en el mercado paralelo tienen como razón fundamental una demanda de dólares insatisfecha producto de la contracción de la oferta de dólares. Una demanda de divisas que no es posible responder entre otras causas por el pago de más de 60 mil millones de dólares en deuda externa al capital financiero mundial y por la asignación de dólares en 10 bolívares a los grandes empresarios y testaferros de los altos jerarcas del chavismo. El gobierno nacional por su carácter de clase, no va suspender el pago de la deuda externa, ni tampoco la puede renegociar postergando su cancelación ante la conservación de las dos irracionalidades que provocan el endeudamiento del Estado en general y de PDVSA en particular: la venta al Banco Central de Venezuela del 80% de los dólares que ingresan en PDVSA a 10 bolívares y el gigantesco subsidio a la gasolina. La inmensa mayoría de los inversores capitalista en el último intento de renegociación de la deuda externa evitaron la postergación del pago de sus bonos, ante el déficit operativo que le produce a PDVSA la venta del 80% de sus dólares en 10 bolívares al BCV y el gigantesco subsidio a la gasolina. En ese sentido, la única medida estatal racional incluso desde una perspectiva burguesa es unificar el tipo de cambio, desestimulando la compra de divisas en el mercado paralelo y provocando la contracción del dólar paralelo.

El problema es que la unificación del tipo de cambio implicaría acabar con el privilegio cleptocrático de sectores de la gran burguesía y de la alta jerarquía estatal: recibir dólares a 10 bolívares para importar con sobrefacturación. Algo que impide la casta burocrática chavista incluso promoviendo el desastre monetario que vivimos en la semana en curso. La excusa más común es afirmar que el dólar preferencial a 10 bolívares es para importar alimentos, medicinas y bienes de higiene personal para el "pueblo", sin embargo continua y se incrementa la brutal escasez que padecemos los venezolanos y las venezolanas. Es conocido por todos que la unificación del tipo de cambio, no evitaría incluso puede hacer más eficiente el subsidio directo de los alimentos, medicinas y bienes de higiene personal. Nosotros, estamos de acuerdo que la salida popular sería la suspensión del pago de la deuda externa para restablecer los niveles de importación de insumos necesarios para la producción local, una demanda de los sectores de la izquierda clasista y del llamado chavismo crítico, pero hasta ahora ni siquiera hubo unificación cambiaría ni un incremento gradual del precio de la gasolina que desaliente el contrabando de extracción en las fronteras creando a su vez subsidios directos al transporte público, tampoco parece posible mientras no haya un movimiento obrero y popular autónomo colocar en agenda medidas estatales como la suspensión del pago de la deuda externa. Por eso, aunque parezca difícil debemos recuperar la bandera del socialismo de las manos de la alta burocracia chavista, organizando una alternativa obrera y popular en el país.

 

Balance 2016: Venezuela. Entrevista

Cira Pascual Marquina

La revista mensual Hemisferio Izquierdo hace foco en Venezuela y conversa con Cira Pascual Marquina, profesora de Estudios Políticos en la Universidad Bolivariana de Venezuela, integrante de Escuela de Cuadros (www.youtube.com/escuelacuadros) y miembro del equipo político-editorial del mensuario PolítiK.

Hemisferio Izquierdo (HI): ¿Qué balance se puede hacer del año que se cierra en Venezuela?

Cira Pascual Marquina (CPM): El año que se cierra ha sido, sin duda alguna, el más difícil para el pueblo llano en la última década. En este sentido me atrevería a decir que nos encontramos con una tormenta perfecta.

Por un lado el impacto de la caída del precio del petróleo --y su correlato en cuanto a la reducción drástica de importaciones que se pagaban con petrodólares-- ya arrastraba al pueblo a una situación francamente compleja desde enero del 2015, cuando se desató el fenómeno desabastecimiento-contrabando de extracción-bachaqueo producto de la propia lógica del capital (con el contrabando las ganancias llegaron a ser del 3000% y el bachaqueo o reventa de productos subsidiados de difícil acceso se convirtió en un fenómeno cotidiano).

Por otro lado, la terquedad del gobierno por cumplir con los pagos de la deuda soberana --la más cara del mundo, por cierto-- adquirida en momentos de boom económico, implicó en este 2016 mayor reducción de las importaciones en un país donde, por diversas razones estructurales históricas, el aparato productivo es minúsculo e ineficiente.

Las implicaciones son bien conocidas: enormes colas de mujeres que se vieron obligadas a poner días e incluso noches a la tarea de alimentar su familia, pues el abastecimiento de productos de la cesta básica a precios regulados --productos que históricamente se han importado con subsidios estatales-- se redujo alrededor de un 60%, mientras que los productos no regulados sufrían un vertiginoso proceso de inflación. Así la crisis, con su tiente claramente machista, se montó sobre los hombros de millones de mujeres humildes que, con mucha paciencia y disciplina, y por supuesto a costa de enormes sacrificios, se convirtieron en el sostén del barrio.

A todo esto el gobierno respondió primero subiéndole dos al discurso de la guerra económica: este discurso se centra en los elementos de conspiración (que son reales pero secundarios) en lugar de examinar las razones estructurales que conducen al comportamiento particular del sistema capitalista en Venezuela (lucha de clases en una economía rentista con bajo desarrollo de las fuerzas productivas, dependencia, corrupción y fuga de capitales, etc.) en un contexto de crisis mundial. Además, y aún más grave, el aparato ideológico de la guerra económica ignora el sufrimiento y los sacrificios de los humildes (ya que el objetivo de dicha guerra es el gobierno) y desconoce que la burguesía es nuestro enemigo de clase (el problema son algunos empresarios malvados y los lumpen-bachaqueros). La conclusión lógica de este relato poco preciso es que la caotización económica se resuelve con la normalización de la propia economía capitalista. En efecto, esto es lo que viene ocurriendo en los últimos meses a través de diálogos con la burguesía y la derecha, y liberalizaciones.

En el primer trimestre del año, en respuesta a la situación económica, el ejecutivo lanzó un plan para captar divisas a través de la explotación minera y el impulso de la producción industrial capitalista (relegando a tercer plano las nuevas formas no-capitalistas, comunales, que Chávez nos legó). Sobre este plan --y sus límites-- Chris Gilbert y yo escribimos largo y tendido.[1] Poniendo bajo la lupa sus objetivos (que implican el abandono del Plan de la Patria en el que se define al socialismo como eje organizador), propusimos como tarea inmediata un reordenamiento y racionalización de la economía que asegurase a corto plazo la satisfacción de las necesidades básicas del pueblo. Dar este paso (eliminar la fuga en el tanque dañado, dijimos entonces) implica (1) planificar las importaciones, priorizando rubros que aseguren la supervivencia del pueblo, (2) eliminar formas de parasitismo de la clase burguesa (y de la burguesía emergente) y (3) sobre todo, asumir la necesidad de impago de la deuda. A estos tres puntos añadiría un cuarto: eliminación de todos los privilegios burocráticos, gastos suntuarios y despilfarros institucionales (gastos que son obscenos en la situación actual y que son también mecanismos de corrupción).

Más allá del plan grueso del ejecutivo para captar divisas, y ante el creciente desabastecimiento y la espiral inflacionaria del mercado negro, el gabinete económico optó por aflojar los mecanismos de control y seguimiento en el marcaje de la mayoría de los productos de la cesta básica. En pocas palabras, el ejecutivo cedió a la presión capitalista y abrió la cancha de la liberalización de la economía, asumiendo en gran medida el programa económico de la derecha. Poco a poco se fueron llenando los anaqueles de productos que habían desaparecido meses o incluso años antes… y millones de venezolanos, las trabajadoras, los precarizados, las madres de familia, los desempleados, pasaron de las largas colas a los paseos por tiendas y abastos donde la mayoría de los productos son simplemente inalcanzables.

Evidentemente esta situación va acompañada de un rápido proceso de pauperización. Hace dos años podíamos encontrar, esporádicamente, personas con dependencia hurgando en las basuras. Hoy, en los lugares donde se concentran los desechos, podemos ver grupos de personas (sobre todo hombres, pero también mujeres, niños, ancianas) rebuscando algo de comida. Lógicamente también han crecido vertiginosamente la mendicidad, la prostitución, la drogodependencia, las situaciones de calle y la desescolarización.

Ahora, el plan de liberalización vino acompañado por una iniciativa gubernamental que tiene como objetivo reducir el impacto de la liberalización sobre los sectores populares: los Comités Locales de Abastecimiento y Producción, mejor conocidos por sus siglas CLAP. Salvando las distancias (hay un elemento claramente clientelar en la iniciativa venezolana), podríamos comparar los CLAP a las Juntas de Abastecimiento y Control de Precios (JAP), las combativas plataformas del Chile de la Unidad Popular que asumieron el control de la distribución y tenían legitimidad y autonomía para confiscar los cargamentos de los comerciantes. En nuestro caso, los CLAP no han madurado como lo hiciesen los JAP, no se han asumido como expropiadores de los expropiadores, pero sin duda alguna son espacios que generan autoorganización en la distribución de bolsas de comida (vendidas a precios regulados), y representan un paliativo para los sectores populares que son beneficiados.

En el transcurrir del año también hemos sido testigos de un salto cualitativo en algunas organizaciones chavistas revolucionarias. Me refiero a experiencias comunales como las de La Comuna El Panal en Caracas y Valencia (dirigida por el colectivo Alexis Vive), La Comuna el Maizal en Lara o La Comuna Agroecológica El Tambor en Mérida, por mencionar solo algunas, y a experiencias obreras como Proletarios Unios en Barquesimento o la Fábrica Chema Saher en la Sierra de Falcón. Las primeras, las experiencias comunales, se van consolidando como autogobiernos populares que, en la crisis, se han autonomizado del Estado y han impulsado producción bajo nuevas formas de propiedad social. Estas comunas son, sin duda alguna, gérmenes de la nueva sociedad como lo fueran los soviets a inicios del siglo XX. Por otro lado, las experiencias obreras de tomas de fábricas se van convirtiendo en ventanas a un porvenir más justo para los obreros en la zona centro del país. Para mi ambas representan el verdadero espíritu chavista y bolivariano, aquel que se rebela contra lo que hay y que se niega a ser sometido. Son experiencias que se deben convertir en un faro para los chavistas revolucionarios, para aquellos que creen en una nueva forma de organizar la economía y la política, para aquellos que reconocen las injusticias del presente capitalista y aspiran a construir una sociedad socialista.

HI: ¿Qué perspectivas se abren para 2017? ¿Qué tendencias en curso marcarán la agenda?

CPM: El próximo año se perfila difícil. El gobierno predice y celebra que veremos un repunte económico hacia mediados de año por el nuevo acuerdo de la OPEP. Pero, ¿puede el pueblo que sufre considerar esto buenas noticias? Seis meses más bajo la situación actual, seis meses más de sacrificios ignorados por la dirección chavista, seis meses más cediendo ante las presiones del capital... la situación no pinta bien. No es extremo hablar de un periodo especial, y es fundamental que al pueblo se le plantee un objetivo. Fidel, cuando cayó la Unión Soviética, reconoció la gravedad de la situación a su pueblo, sus enormes sacrificios, y planteó un camino digno, con un horizonte heroico, para los cubanos: "Cuba será un eterno Baraguá". [2]

HI: ¿Cuáles son las principales tareas desde la perspectiva del bloque popular?

CPM: Yo diría que la tarea principal de los revolucionarios es construir una unidad bolivariana de izquierda, un bloque chavista autónomo con capacidad de analizar la situación sin amarres institucionales, una plataforma desde la que se plantee sin miedo la situación que vivimos (sus raíces, las clases y tendencias en pugna, las consecuencias, la salida revolucionaria). Claramente, una importante parte del pueblo ha dejado de creer en el gobierno precisamente porque éste no le dice la verdad.

Finalmente, este bloque debe estar atado a las iniciativas populares más avanzadas y, sin convertirse ahora en una oposición de izquierda, debe ser audaz y jugarse el todo por el todo para salvar el proyecto chavista y, en consecuencia, salvar al pueblo de la catástrofe.

En septiembre de 1917 Lenin escribió un texto brillante, "La catástrofe que nos amenaza y cómo combatirla".[3] En ese documento de gran vigencia, el bolchevique analizó la pasividad del gobierno de Kerensky ante la conspiración capitalista y planteó el programa para salir de la crisis. Propongo que leamos el texto, y entendiendo que no hay fórmulas para hacer la revolución, nos aboquemos a la tarea de construir un bloque de izquierda que, verdaderamente libre de lazos burocráticos y miedos mezquinos, se plantee nuestra salida a la catástrofe que nos amenaza.

NOTAS:

[1] Chris Gilbert y Cira Pascual Marquina, "El espejismo del "país productivo" y el futuro del pueblo venezolano" en Rebelión: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=208627.

[2] Ver proclama del periódico PolítiK, "A un año de la nueva etapa": http://tatuytv.org/index.php/analisis-y-opinion/comunicados/3324-a-un-ano-de-la-nueva-etapa.

[3] V.I. Lenin, "La catástrofe que nos amenaza y cómo combatirla": https://app.box.com/s/ee9jq1lk0qbz36lt3jkquc5kjxf96dl0.

 

Freiman Páez culpable, ese sí es un verdadero peligro, ese sí es un revolucionario: ¡Métanlo preso!

Roland Denis

Tú te lo mereces Freiman, yo te quiero mucho, de verdad eres una persona intachable, de esos que algunos dicen que son las últimas almas en pena de un sueño gigantesco de liberación , de solidaridad, de reconstrucción nacional que pasó por nuestro país. En definitiva unos de esos locos que en tanto tal pierden el sentido dentro de una realidad que de acuerdo a las hegemonías comunicacionales y de poder, los que hablan de revolución, como el propio Maduro o Merentes, o todos estos seres que acusando a otros lo que ellos mismos han creado, son por su lado unos magnates que día a día están peleándose entre sí los últimos negocios que están haciendo con el hambre del pueblo venezolano. Triangulación de importaciones, reparto de los dólares desde 10 por dólar hasta Dicom, arreglos con los banqueros e importadores amigos de las respectivas comisiones, sobreprecios hasta de las agujas que importe cualquier ente de Estado hasta llegar a este desastre monetario, hijo irracional de todas estas jugadas gansteriles.

Freiman, me parece muy bien que estés preso. Yo por mi lado estoy un poco asustado porque de verdad no tengo de donde chupar y no tengo negocios que aportarle a Elias Jaua o Haiman El Troudi o el gobernador Carrizales, (entre otros centenares de sátrapas) y por tanto, al no tener billete interesante que aportar, y de pendejo todavía hablo de revolución y de esas cuerda de significantes que ellos utilizan pero que poco a poco dentro del pueblo,que hasta el mas sano y creyente podían tener algún sentido, hoy en día empiezan a ser vomitables para millardos de seres que sufren ese lenguaje, ellos podría terminar como tu. Me da miedo entonces, ser algo que se parezca a ti o a gente como tu.

Por eso dentro de mis inseguridades y miedos, prefiero que el poder de la pauta me tranquilice, te meta preso a tí como debes estar y ajustados a la ley romana, donde cada ciudadano libre es responsable de sí, aprendas, como deberíamos hacer todos nosotros, que la revolución ya es un monopolio mafioso más. Y que tú que te diste el lujo de seguir enarbolándola no solo fuera de esa mafia, sino denunciándola y por otro lado manteniendo esa cosa estúpida que hacen seres como tú, que es estar organizando campesinos, radios comunitarias, grupos culturales que creen en la libertad y la justicia libre, aprendan de una vez por todas a quien pertenece la revolución convertida en mercancía simbólica más.

Que aprendas a través de estos insólitos hechos como los ocurridos en este país y la manipulación archimafiosa de la moneda, que cuando suceden estas cosas, es cuando el cuero de la basura gobernante saca de lleno sus alientos fétidos, porque se hace demasiado evidente a la cara de millones, no es el histérico escuálido anticubano, antichavista y anticomunista quien va preso, así tenga veinte fusiles y una granada en mano y treinta saqueos prefigurados, no, quien va preso es el verdadero peligro: el auténtico militante revolucionario que es capaz de prender la candela pero de verdad verdad. Es decir, el que le devuelva a la realidad su sentido, el que pone en claro cual es la auténtica guerra entre pobres y ricos, entre poderos y expropiados, y saque a flote que no es solo el poder de siempre de las cofradías dominantes quien reinará, sino que hay poder un oculto rebelde que cuando se libera, como todos los días tipos como tu intentan, no hay ni dios que pueda con su fuerza.

Pero no importa yo soy valiente con un firme sentido de realidad. Con los pies en la tierra, realista así sea dentro de la irracionalidad mas profunda como la que acabamos de atravesar. Y como tal, frío y pensando que en definitiva uno está solo en el mundo y que las utopías son muy bellas, pero quien atraviesa la existencia hasta que el cuerpo y los años le den, es una existencia individual, precaria y desapoderada, la que uno lleva encima y nadie va a hacer nada porque no sea así, me termina de parecer fantástico que estés preso, acusado de vandalismo y haber liderizado la quema de bancos y billetes en Guasdualito, siendo agente principal del saboteo imperialista y su agente más eficiente en los llanos venezolanos. Porque el mundo que vivimos es eso, de individualidades apartadas una de la otra, donde cada una tiene que ver consigo mismo sin contar con nadie, por el contrario, el resto de la humanidad es nuestro principal enemigo. Así que tu también por mas que seas mi amigo y hermano en el fondo eres mi enemigo, el que me niega a enterrar los sueños libertarios de todos y todas que una vez estúpidamente compartimos.

En definitiva, yo por mi lado, pensando como es este mundo, miedoso porque no tengo nada que aportarle de interesante a estas mafias empoderadas de gobierno y por tanto probable sospechoso, no obstante me lleno de valentía, de suprarealismo, y aplaudo por tu prisión, aplaudo igual el silencio de miles de “militantes revolucionarios” que saben muy bien quien eres pero no alzan ni una palabrita aislada por ti, porque entiendo que al fin se llenaron de realismo como yo.

Aplaudo tu prisión porque me aterra ser el espejo de tu ejemplo y terminar como un estúpido e inservible mártir como tú. Nicolás y el CICPC, se encargaron milagrosamente de quitarme ese espejo que todavía me perseguía y terminaron de reventarlo. Y ¡oh maravilloso Mario Silva!, a ti un beso, porque eres tan vendido y sucio, la esponja última de cuanta bufonería estos años chavistas han podido crear, que estuviste a la altura de hacer la acusación que a mí me sirve para justificar en cualquier cervecería mi actitud. Resulta que tu inteligencia sobrenatural descubrió que Freiman era uno de los grandes conspiradores llaneros miembro de Primero Justicia. Claro hombre, esta actitud, de la valentía bufona, es perfecta para justificarlo todo. Según Diosdado y sus supremas fuentes de inteligencia y explicación, todo esto siempre cae en el mismo hueco explicativo: todo lo que sucede contra el orden es una conspiración escuálida, es decir, contra los que desean tomarse lo que este se lleva y se roba todos los días. Perfecto, la detención de Freiman debe seguir el mismo patrón de acuerdo con Mario: ¡es un conspirador de la oposición de “ultraderecha”!, como ellos ahora la nombran. Me limpiaste así la última consciencia culpable que podía tener: sí Freiman, agente imperialista de Primero Justicia, perfecto que vayas preso.

Ay que bien me siento, diciendo estas cosas que tanta libertad le dan a mi precaria realidad individual y pendeja. Me liberan de todos esos atavismos que estos malditos y auténticos revolucionarios me llenaron por tanto tiempo. Ahora si lo digo, gracias camarada Nicolás, gracias camarada Diosdado, gracias camarada Mario Silva, gracias maravillosa y salvadora tropa del CICPC:

A FREIMAN PAEZ, EJEMPLO LIBERTARIO Y MILITANTE METANLO BIEN PRESO, ACUNSENLO DE TODO, NO LO DEJEN SUELTO NUNCA QUE DE LO CONTRARIO SOLO SERES COMO ÉL SERIAN CAPACES DE DENUNCIAR Y DESTROZAR NUESTRA MISERABLE REALIDAD.

¡ASÍ ES CARAJO, ASÍ SE HACE, ASÍ ES QUE SE GOBIERNA!

Fuente:
http://www.aporrea.org/, 18 de diciembre 2016

Subscripción por correo electrónico
a nuestras novedades semanales:

El responsable de tratamiento de tus datos es Asociación SinPermiso y la finalidad del tratamiento es hacerte llegar nuestras novedades. Puedes ejercer tus derechos en materia de protección de datos contactando con nosotros*. Para más información consulta nuestra política al respecto (*ver pie de página).